Cada vez que me siento en el mueble por cinco, seis, diez horas corridas, me estoy matando.
Cada vez que pasa el día y me doy cuenta que consumí el triple de calorías que mi cuerpo necesitaba, me estoy matando. Cada vez que pasa una hora, un día, una semana y no he hecho nada, me estoy matando. Cada vez que pasa un día, una semana, un mes, un año sin hacer ejercicios, me estoy matando. Cada vez que pasa un día, que pasan los días, me estoy matando.
Espero que todo esto termine bien y que no sea solo la historia de una maldita gorda de mierda desperdiciando su vida. Espero que pueda ser una guerrera, que esta sea una historia de supervivencia, de superación.
4 de diciembre de 2012
22 de septiembre de 2012
23 de abril de 2012
Transformaciones.
Muchas veces nos sentamos a
quejarnos o lamentarnos por las cosas que no logramos. Por las alegrías que no
llegan, por las penas que no se van. Por los resultados que no se materializan.
Es probable que si continuamos se repita siempre nuestra vida.
Si mantenemos una postura pasiva y de lamentación es probable que
no pase nada. Es preciso actuar según nos corresponda y confiar en que aquello
que se escapa de nuestra capacidad de acción, será movilizado por la energía
positiva y la ayuda divina.
Somos libres para elegir aquello que queremos en nuestras
vidas, nada ocurrirá si nosotros mismos no tomamos una decisión. Una vez
decidimos el camino que queremos seguir, nos resta continuar haciendo aquello
que nos corresponde y confiar.
Mientras estas lamentándote, se pasa el tiempo para actuar.
Mientras te quejas diluyes las soluciones que estaban disponibles. Mientras te
mantienes pasivo e inconforme va desapareciendo la ayuda y las bendiciones que
estaban disponibles para ti.
Muchas veces es preciso continuar.. cuando lo haces, poco a poco
el malestar se va transformando en bienestar. Empezar a reír cuando aún
estas triste. Empezar a caminar cuando aún te duelen los
pies. Empezar a confiar cuando aún las dudas están a tu alrededor.
Todas las bendiciones están
disponibles para quienes actúan según les corresponden. El orden divino te
apoya en tus decisiones. Confía y actúa, poco a poco serás
testigo de increíbles transformaciones.
Fotografía por David Ryle
Fotografía por David Ryle
Etiquetas:
CAMBIOS,
meditación,
superación
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